Vuelvo a la
saga de Puerto escondido tras un par de meses de descanso. Este es el
cuarto libro, una historia que desde el primer momento se desvela como
un homenaje a las intrigas detectivescas de principios del siglo XX y
podría ser perfectamente una novela escrita por Agatha Christie si a
Agatha se le hubiese dado por nacer en San Vicente de la Barquera. Pero
como la reina del crimen nació en el entrañable pueblo británico de
Torquay, Lo que la marea esconde fue escrito por María Oruña y lo de ser
el artista más emblemático de San Vicente de la Barquera le tocó al
también sobradamente talentoso David Bustamante.
La historia
presenta de entrada un asesinato imposible. Una señora de la alta
sociedad santanderina, presidenta del Real Club de Tenis y con poder
hasta para decirle a Rafa Nadal que ella es más de Roger Federer sin que
pase nada, se va a su camarote en el barco donde asistirá a una cena.
Necesita descansar quince minutos antes de empezar a comer porque está
fatigada tras haber llegado de un largo viaje. El problema es que esos
quince minutos se le complican muchísimo y los demás comensales acaban
teniendo que tirar su puerta abajo tras escucharla gritar.
La
situación es complicada, como se podrá imaginar. Después de reventar la
puerta la gente se encuentra a la mujer tirada en su cama con menos
vitalidad que la capa de ozono en los años 90 y sin esperanzas de que se
reenganche a la vida. Tiene una enana mancha de sangre en el pecho como
si alguien le hubiera apuñalado sin ganas y como si ella hubiera
sangrado también sin ganas. Si es raro ver que alguien fue acuchillado
sin sangrar más de lo que se sangra al cortarse con un folio, más raro
aún es que apuñalen a alguien en una habitación cerrada desde dentro en
la que no hay más gente que la persona acuchillada.
Este es el
crimen imposible que tiene que resolver la siempre efectiva Valentina
Redondo, que en esta novela aparece en sus momentos más oscuros, con
unas rayadas internas muy destacables que tuvieron su origen en una
traumática operación policial llevada a cabo entre los sucesos del
tercer libro y los de este. La Valentina más nietzscheana en un libro
con un final poco predecible.
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