Rubén Pedreira

Wat Rong Khun, también conocido como El templo blanco de Chiang Rai, es una de las atracciones más impresionantes y originales de Tailandia. Es una construcción comenzada en 1997 en forma de templo budista, creada por el artista tailandés Chalermchai Kositpipat, que combina elementos tradicionales con referencias a la cultura popular y al arte contemporáneo.

Wat Rong Khun

El templo se encuentra en la provincia de Chiang Rai, al norte del país, y se empezó a construir en 1997 con fondos sacados del bolsillo del artista. Su intención es crear un centro de aprendizaje y meditación, donde las personas puedan beneficiarse de las enseñanzas budistas y admirar la belleza y el simbolismo de su obra. La finalización del proyecto está prevista para 2070 y constará de nueve edificios, entre los que se incluyen la sala principal, una sala de reliquias, una sala de meditación, una galería de arte y unas viviendas para monjes.

Mural interior del templo

El templo destaca por su color blanquísimo y por los numerosos fragmentos de cristal incrustados en su fachada, reflejando la luz del sol y dándole una apariencia luminosa. El color blanco representa la pureza y el cristal la sabiduría de Buda. Para acceder al templo hay que cruzar un puente sobre un pequeño lago, donde se ven cientos de manos que simbolizan el purgatorio. El puente proclama que el camino hacia la felicidad es renunciar a la tentación, la codicia y el deseo. Al otro lado del puente se encuentra la puerta del cielo, custodiada por dos criaturas que representan a la muerte y a Rahu, el que decide el destino de los muertos. Delante del templo hay varias imágenes de Buda en actitud meditativa.

Vista del puente rodeado de manos

El interior del templo sorprende por sus pinturas murales, que mezclan escenas religiosas con personajes y símbolos de la cultura popular, como Superman, Harry Potter, Matrix, Michael Jackson o Hello Kitty. El artista quiere mostrar el contraste entre el bien y el mal, entre lo sagrado y lo profano, entre lo oriental y lo occidental. También quiere expresar su visión crítica sobre los problemas sociales y políticos del mundo actual.

Un puente sobre el lago en el complejo del templo

Otro edificio que llama la atención por su color es el de los baños públicos, que es dorado. Este color simboliza cómo las personas se centran en los deseos mundanos y el dinero. El edificio dorado representa el cuerpo, mientras que el templo blanco representa la mente. El artista quiere transmitir la idea de hacer méritos y enfocarse en la mente, en lugar de en las cosas materiales y las posesiones.